Category Archives: Elegir un amigo

Sí, pero… ¿de Raza o Mestizo?

Ya hemos decidido tener o un perro o un gato. Pero ¿compramos uno de raza o adoptamos un mestizo?
Los animales de raza son bonitos y conocemos como serán cuando lleguen a adulto. Tienen un tamaño, características y carácter más previsibles que uno sin raza. Por otro lado, son más propensos a sufrir problemas congénitos y son menos resistentes a algunas enfermedades que los “cruces”. No sabremos a ciencia cierta como será un mestizo al crecer pero, si optamos por la adopción, normalmente tendremos un animal mestizo que a menudo conservará lo mejor de cada raza. Si decidimos adoptar un animal debemos acudir a un centro de protección, centro de acogida de animales o albergue. Normalmente a la hora de adoptar pensamos en un cachorro pero también existe la opción de adoptar un animal adulto. Esta opción de hecho debería ser la única válida cuando el propietario ha llegado ya a una determinada edad, cuando el posible propietario es muy mayor. El animal adoptado no debe vivir más que su dueño ya que si es así, será necesario buscarle otra vez un nuevo hogar.

Si nos decidimos por un perro o gato de raza, las mejores opciones que podemos barajar son la compra en una tienda o en un criador profesional. Todas las tiendas de animales y criaderos que cumplen con los requisitos legales tienen un veterinario encargado de la salud de los animales y deben vender los animales en perfecto estado de salud. Debemos exigir siempre la factura, sin una factura no podremos reclamar si existen problemas. Si nos entregan una cartilla oficial con sellos de vacunas y tratamientos antiparasitarios deben ir siempre acompañados con la firma de un veterinario colegiado. En el perro debemos exigir copia del justificante de inscripción de camada si fuera necesario. Por último debemos informarnos sobre la garantía post-venta que nos ofrece el establecimiento.
La edad adecuada para comprar un perro es alrededor de las ocho semanas de vida ya que a esa edad el perro ha superado junto a su madre y hermanos unas fases de desarrollo muy importantes que influirán en su carácter para toda la vida. La elección del sexo, elegir un macho o una hembra es otra decisión que debemos tomar. En los perros de razas grandes como los de guarda y defensa, los machos suelen ser más grandes, y más dominantes de carácter, y necesitan una mano firme. Las hembras generalmente son algo más pequeñas y más dóciles. El tamaño también es una consideración a tener en cuenta a la hora de elegir un perro. Los grandes y gigantes son más potentes y requieren más ejercicio que las pequeñas, por lo cual serán menos adecuadas para los ancianos o las personas sedentarias. Hay que tener en cuenta que los problemas en la relación animal de compañía-hombre son casi siempre consecuencia de la desinformación. Por ello, antes de elegir a tu animal de compañía, por su bien y por el tuyo…… Consulta a tu veterinario, él te aclarará todas las dudas

Antes… visita al veterinario

La primera visita al veterinario, la que se debe hacer antes de tener perro o gato, puede ser la más importante de todas. Nadie duda de la importancia de acudir a la consulta del veterinario cuando hay algún problema, la inmensa mayoría de los propietarios lo hacen, pero pocos piensan, antes de tener perro o gato, lo importante que puede ser realizar una primera visita al veterinario antes de decidir adquirir un animal.
El veterinario nos contará que un perro necesita salir a la calle por lo menos tres veces al día para hacer ejercicio y sus necesidades. Las condiciones personales y familiares, horario de trabajo, tiempo libre, si se realizan viajes frecuentes, salidas de fines de semana, etc también pueden hacer que nos decidamos a vivir con un gato en vez de un perro.
Las obligaciones del propietario de un animal de compañía son:

• Administrarle una dieta equilibrada
• Proporcionarle un lugar adecuado donde vivir
• Ofrecerle tiempo y espacio para juegos y paseos
• Darle un aseo periódico
• Facilitarle una educación adecuada que facilite la convivencia con los demás
• Visitas periódicas al veterinario.

Una vez que nos comprometemos a cumplir estos puntos aceptando la responsabilidad que supone, que hemos decidido tener un animal de compañía que nos acompañará 10 o 15 años, entonces, deberemos elegir el tipo que más nos conviene. Hay que tener en cuenta que los problemas en la relación de un perro y su propietario son casi siempre consecuencia de la desinformación. La decisión del tipo de animal que queremos que nos acompañe los próximos diez o quince años no debe tomarse a la ligera:

• Si la elección está entre un perro o un gato, habrá que pensar que los perros necesitan salir tres veces al día y hacer ejercicio. Las condiciones personales y familiares, el horario de trabajo, tiempo libre, si se realizan viajes frecuentes, salidas de fines de semana, etc pueden hacer que optemos por tener un gato en vez de un perro.
• Para quienes buscan un acompañante activo es preferible también tener un perro que un gato, quienes tienen poco tiempo o pasan pocas horas en casa pero quieren disfrutar de un animal de compañía deberán optar por un gato.
Ya hemos decidido tener perro o gato. ¿Compramos uno de raza o adoptamos un mestizo?, esta es la siguiente pregunta que debemos hacernos.

Empecemos por el principio…

Vivir con un animal de compañía te proporciona muchas cosas. Los animales te ofrecen compañía, buenos momentos y se ha demostrado que aportan una amplia variedad de beneficios psicológicos, disminuyen la sensación de soledad proporciona una sensación de ser “útil”, te hace de sentirte querido, desarrolla la confianza en uno mismo, enseña a los niños y adolescentes a asumir responsabilidades, favorece las relaciones y facilita el contacto entre personas al salir a pasear o en los juegos en el parque, disminuye la ansiedad y el estrés, mejora los estados “depresivos” .

Pero no todo son “ventajas”. Convivir con un animal de compañía implica una serie de obligaciones que tienes que conocer. Obligaciones hacia el animal y obligaciones hacia tus vecinos y hacia todas aquellas personas que conviven contigo.

Como propietario tendrás que darle una dieta equilibrada, proporcionarle un lugar adecuado donde vivir, tiempo y espacio para juegos y paseos, una limpieza periódica, una educación adecuada que facilite la convivencia con los demás y por supuesto atención veterinaria.

Además…hace falta una reflexión… tienes que pensar que si decides tener un animal de compañía contraes una obligación durante toda la vida del animal, durante unos quince años, y debes pensar si eres capaz de aceptar esa responsabilidad durante tanto tiempo.

No debes decidir tener en casa un animal por capricho o impulso, debe ser una acción meditada por toda la familia que va a convivir con él ya que tu perro o te acompañará durante muchos años de vida. En todo este tiempo puede que cambies de situación personal, tendrás pareja, hijos, te separarás o irás a vivir con alguien nuevo, cambiarás de trabajo o de lugar de residencia y debes estar dispuesto a que un animal de compañía te acompañe en estos cambios. Si tenemos dudas o no quieres asumir esto, no pasa nada, es normal… pero es mejor que decidas no tener un animal de compañía.

Pero si has valorado todo esto y estas dispuesto a afrontar el reto, entonces, ha llegado el momento de pasar a la siguiente fase y de responder a otra serie de preguntas. …